Se ha preguntado alguna vez como quiere ver a Arequipa para el 2021 o como piensa que será el Departamento para el 2040, ha soñado alguna vez que nuestro Departamento ejerce un rol protagónico no solo a nivel del territorio nacional sino en el mundo post-moderno; no le gustaría acaso que sus hijos o los hijos de sus hijos se sientan orgullosos de pertenecer a este suelo y con justa razón puedan llamarse la Republica Independiente de Arequipa no con ánimos independentistas, sí con el animo de ser el mejor en vivir la peruanidad.
El 2021, el Perú celebrara 200 años de su vida independiente y el adiós a la administración de la Corona Española, y observamos que el peruano de a pie no tiene ni la mínima expectativa de aquello que quiere para el Perú en su bicentenario. En igual medida e incluso en un sentido de decepción, los arequipeños en general no están mirando al 2040, fecha en la que cumpliremos 500 años de fundación española.
Arequipa a pesar de los aportes a la formación de la peruanidad a través de la política, la cultura, la culinaria, el arte entre otros hasta la fecha no ha dejado de ser una ciudad de paso o ciudad intermedia; flanqueada entre los Andes, el Océano Pacifico y la influencia de los desiertos de Tarapacá y Nazca; somos sin lugar a duda un territorio andino, costeño, agreste y desértico bendecido por el colector natural de agua dulce de la Reserva Salinas y Aguada Blanca, las riquezas mineras, ictiologiítas, agrícolas sumado a los paisajes naturales y de obrar humano.
En el ideario político y cultural, la proximidad de esas fechas debieran ser el factor de inspiración más aun por el acercamiento físico de Brasil por medio de la carretera Interoceánica, el acercamiento con Chile debido a la coyuntura política y nuestra ubicación geográfica, todo se configura de tal modo que exigen de Arequipa un protagonismo y liderazgo en el contexto político, cultural y social aun mayor que aquellos años medianamente dorados de los 50 o aquel siglo de la Independencia, de las revoluciones e inclusive de aquel rol destacado de la Colonia.
Todo el departamento de Arequipa debe apuntar sus esfuerzos para constituirse en la puerta del pacifico para Brasil mirando al Pacifico y en especial a China no solo en el aspecto comercial sino también en el tecnológico, cultural y turístico. Arequipa debe colocar en su agenda de política intraregional la visión y el objetivo de constituirse en plataforma de vinculaciones comerciales del Perú con Chile, Brasil, Bolivia, Argentina y China.
Y en esta especial coyuntura, Arequipa debe plantearse un programa de desarrollo sustentable que procure contribuir en todo momento a la conservación del medio ambiente. Debe concertar esfuerzos por generar una cultura de paz, una cultura social que apele por el crecimiento a través de la inclusión social y cultural.
Mención aparte, no cabe duda que la Interoceánica tendrá impactos negativos en el Medio Ambiente pero aquellos no son mayores a los pecados cometidos por el crecimiento desarticulado de la urbe arequipeña, que ha devenido en la fragmentación y progresiva extinción de la campiña, entre otros factores de impacto negativo.
Es pues un reto de los nuestros hacer frente a estos problemas que no son un obstáculo fatalista son más bien un prueba de nuestras capacidades, con miras a redimensionar la visión romántica que tenemos de la ciudad y la región de Arequipa, apostando por un protagonismo dinámico en el siglo XXI
Adduar Samir Lozada Talavera
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